Jota Jordi, ese meme andante que mantienen en El Chiringuito ante el gran número de audiencia que consigue reunir, sea para reírse de él o aplaudir sus tonterías, es sin duda una de las armas de Pedrerol a la hora de generar ruido y que se hable de su programa. Un especialista a la hora de hacer saltar la liebre con las sandeces que es capaz de soltar en un corto periodo de tiempo. Pero, sin duda, este ridículo de Jota Jordi supera a todos, hablando mal de un jugador que metió dos goles a su equipo para ganar El Clásico, mejor jugador de La Liga, pichichi y que se mantiene como el jugador con más MVPs en su colección.
“El mejor Bellingham no es titular en el Barça” espetó el catalán ante el asombro de sus compañeros en el directo de El Chiringuito. Unas palabras que solo generan sorna por parte del madridista, que ve como el tertuliano culé sigue con un enorme dolor ante el talento que consiguió fichar el Madrid, el cual si puede acudir al mercado a fichar los mejores talentos mientras el Barça debe conformarse con las sobras más viejas que encuentra junto a chavales sobreexplotados de su cantera, como Lamine Yamal, quien ya muestra síntomas claros de cansancio.
Antonio Guijarro retrata el ridículo de Jota Jordi, dos culés muy diferentes
Mientras por un punto tenemos un fanático desmedido como Jota Jordi, al cual ningún madridista puede ni debe respetar, tenemos en contraposición a Antonio Guijarro, quien, siendo culé declarado, tiene todo el respeto del máximo rival al hablar siempre de fútbol y desde el respeto. Una diferencia sustancial tanto de educación como de deportividad. Mientras uno se hace famoso por llorar y ser protagonista de memes, el otro (más allá de su dilatada experiencia) crece en Youtube con informaciones como adelantar el fichaje de Bellingham por el Real Madrid.
En su canal Guijarro comparte un video hablando de estas palabras, retratando a Jota Jordi y mostrando una realidad que pocos culés parecen querer mostrar, un personaje como el tertuliano catalán solo mancha el escudo del Barça y afea a su afición, la cual lenta pero inexorablemente va asumiendo el discurso victimista, populista y llorón de Jota Jordi, creando una generación de culés totalmente alienada.
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