Tras un aluvión de críticas encima de la figura de Rodrygo Goes, el delantero brasileño está de dulce, viviendo un renacer desde el partido frente al Braga, donde marcó y se desquitó de ese bloqueo mental que padecía el carioca. Tras el partido frente a los portugueses protagonizó dos dobletes frente a Valencia y Cádiz, redondeando su nivel con otro golazo imperial anoche frente al Nápoles. Una racha goleadora que aúpa al internacional brasileño de tener solamente 1 gol a 8 goles, superando a Joselu y colocándose como 2º goleador de los blancos.
Su enorme rendimiento llega en un momento donde Vinicius cayó ante su lesión con Brasil, llevándole de nuevo a la izquierda tal y como jugaba en el Santos y reluciendo como nunca. Una situación que da un bendito problema a Ancelotti, quien deberá decidir que jugador ocupa la banda zurda ante el enorme nivel de Rodrygo frente a la apuesta segura de un Vinicius eléctrico que ya cuenta con unos galones más que importantes en Valdebebas.
Ancelotti deberá decidir, Rodrygo o Vinicius

Esa libertad es fundamental para él y, según sus propias palabras, donde más la encuentra es en la mediapunta: “A mí me gusta jugar más de 10. Pero la verdad es que puedo jugar en cualquier posición del ataque, aunque si me dan a elegir diría que de mediapunta”. Pero ese puesto es para Bellingham y eso no va a cambiar. Lo que sí admite discusión, al menos hasta que vuelva Vinicius de su lesión, es el beneficio que puede obtener el Madrid con Rodrygo en la banda izquierda.
Cuando vuelva Vini, el ‘marrón’ será para Ancelotti, mayor o menor en función de cómo le haya ido al ex del Santos en ausencia de su amigo y compañero de Seleçao. Y en el horizonte, otro actor para la ecuación, Mbappé. Si finalmente el francés no renueva con el PSG y decide firmar por el Madrid, el club blanco se puede ver en el verano de 2024 con tres futbolistas cuyo rendimiento se dispara desde el extremo izquierdo.
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