Ayer el Real Madrid consiguió una victoria in extremis contra el Alavés en un partido donde los hombres de Carlo Ancelotti no mostraron su mejor cara, con un ataque poco operativo y un centro del campo con un cortocircuito claro ante la poca fluidez del juego. Un duelo donde apareció un nuevo problema para Ancelotti, que empañó la victoria merengue frente al combinado de Álava.
La lesión de Rodrygo en los últimos minutos del partido dispara la alarma roja del equipo merengue, que puede verse entrando en 2024 sin su dupla brasileña, teniendo solamente a Brahim y Joselu como delanteros del equipo. Además, la roja a Nacho le dejará mínimamente el primer partido sin poder competirlo, aún sin saber si La Liga sancionará al madrileño, obligando al Real Madrid a fichar centrales, con la vuelta de Rafa Marín más cerca que nunca y un debate interno entre un veterano como Varane o un proyecto de futuro como Yoro o Gonçalo Inácio.
Ancelotti explotó tras conocer un nuevo problema
El ‘6’ realizó una dura entrada a Samu Omorodion al inicio de la segunda mitad que, después de una revisión del VAR, terminó siendo roja directa. Esta nueva expulsión del one club man ha provocado que el Real Madrid se enfrente a una situación crítica: Ancelotti deberá confiar en futbolistas que no son centrales naturales para esperar a que el propio Nacho cumpla su sanción.
“Tú me quieres jubilar antes de tiempo… ahora no tenemos centrales“, comentó Carlo Ancelotti a su futbolista. La situación del Real Madrid no es nada agradable de gestionar, ya que el cuerpo técnico contaba con la usual fiabilidad que suele tener el capitán merengue en los momentos más complicados a lo largo de una temporada
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