Alfonso Ussía acaba de dejar un artículo en el diario El Debate que levantará ampollas dentro de ese madridismo que espera con ansias el fichaje de Mbappe y que le da igual que tenga que pasar por encima del escudo o que tengamos que seguir humillaciones, todo es poco por ver a la estrella francesa en el Real Madrid.
Esta parte del madridismo es tangible y por redes vemos a cientos de madridistas clamar por el fichaje del francés a toda costa. Pero otra parte del madridismo (donde yo me incluyo) no quiere ver a este chico en el Madrid o, al menos, no hasta que públicamente se disculpe y se gane el perdón en el campo. La humillación del año pasado no puede pasar como si nada, un chico de 25 años riéndose del 14 veces campeón de Europa no es algo que se pueda tolerar y, como demostró, viene con un ambiente tóxico y unos galones de estrella que, para mi, aún no se ha ganado porque cabe recordar que, siendo el mayor dentro de la nueva hornada de talento joven (Vinicius, Haaland, Rodrygo…) es el mayor de todos y no ha sido capaz de levantar ni una sola Copa de Europa con un equipo de PlayStation.
Y en esta línea negativa se encuentra el artículo que os dejaremos al final de Alfonso Ussía atacando, no a la imagen de Mbappe esta vez, sino a su madre, una persona que, aunque pasa desapercibida en los análisis e informaciones de Mbappe, es uno de los personajes clave. La madre de Mbappe parece la encargada de llevar las negociaciones del niño como si este no fuese lo suficientemente mayor para tomar sus decisiones, Fayza Lamari, la mujer que viajó hasta Qatar semanas antes de que Mbappe anunciaba su renovación… mucha coincidencia creo yo, una Fayza Lamari que recientemente anunciaba que abría una agencia de representación de jugadores, a los que espero que lleve mejor que a su propio hijo.
Para terminar este artículo y dejaros que leáis a Ussía daré mi escueto punto de vista. Mbappe ha demostrado que, puede que sueñe jugar con el Real Madrid, que de pequeño fuese aficionado del conjunto blanco, pero de mayor ha demostrado que hay algo por encima del amor al escudo blanco y es el dinero, un Mbappe que está cogiendo una actitud Neymaresca y está conduciendo su carrera de la misma manera, un jugador que parecía destinado a dominar el fútbol mundial pero que está viendo como Vinicius o Haaland le pasan por izquierda y derecha. Percibo un ambiente muy sano en el vestuario del Madrid y, si fichamos a este chico, con su toxicidad y su aberrante salario, estoy seguro que contaminaría al resto de compañeros, por mi parte y termino aquí, igual que pasó con Neymar, su calidad no tapa la mochila que trae y, bajo mi punto de vista, el objetivo del Real Madrid debería pasar por uno de los 9s del City, Erling Haaland y/o Julián Álvarez. No nos dejemos humillar por la diva francesa, si tanto ama el dinero y su ciudad, no tiene sitio en Madrid.
El artículo de Ussía lo podéis leer aqui: https://www.eldebate.com/opinion/20230616/madre-mbappe_121879.html?facet=app
