Siempre que vemos un parón de selecciones hablamos del famoso virus FIFA y es que algunos de los jugadores más importantes, por culpa de estos largos viajes y de estos enfrentamiento,. muchas veces contra selecciones de peor calidad que terminan dando muchas patadas, algunos de los cracks mundiales terminan lesionados y los equipos ,que al fin y al cabo son los que pagan el salario el jugador, son los grandes perjudicados por esta situación conocido como el virus FIFA. En este último parón vamos a comentar el millonario virus FIFA que obligará a que el máximo organismo internacional tenga que pagar una compensación multimillonaria.
Hablamos del partido entre Brasil y Uruguay en el cual los charrúas consiguieron una gran victoria contra el combinado brasileño por 2-0 en Montevideo y donde la peor noticia para el combinado de la canarinha, más allá de la derrota que les pone una situación complicada de cara a la clasificación, es la lesión de uno de sus cracks, Neymar. El futbolista protagonizó una lesión realmente dantesca que presumiblemente le dejara fuera a los terror de juego durante mucho tiempo.
La lesión de Neymar, millonario virus FIFA

Tal y como informa Sun Sport: “la última agonía de la lesión de Neymar podría costarle a la FIFA 6,5 millones y el organismo rector se enfrenta a pagarle al al y la al una enorme compensación después de que el brasileño fuera descartado para la temporada“. El flamante fichaje de la Liga Saudí se perderá la actual temporada, el jugador actualmente en el Al Hilal era uno de los focos mediáticos que habían conseguido desde las tierras árabes, sin embargo este parón FIFA condena a que el jugador se pierda toda la temporada y que, por ello, deberán pagar compensación millonaria.
La FIFA indemnizará al equipo árabe y veremos si esto supone un cambio en la historia del fútbol, con una FIFA que debe indemnizar a los equipos cuando sus grandes estrellas terminan lesionadas en parones FIFA que todos los aficionados del fútbol están de acuerdo en que sobran en las temporadas, cortando rachas de equipos y suponiendo que algunos de los mejores equipos del mundo vean truncadas sus temporadas, quienes al final son quienes pagan los salarios, mientras que la FIFA rapta a los jugadores con sus selecciones sin que los clubes puedan hacer nada.