El futbolista argentino Papu Gómez enfrenta un futuro incierto en su carrera tras dar positivo en un control antidopaje mientras aún era jugador del Sevilla en noviembre de 2022. Aunque posteriormente rescindió su contrato con el club español y firmó con el Monza italiano este verano, la noticia de su positivo podría poner en peligro su contrato actual. Según fuentes de ‘Relevo’, Papu podría enfrentar una sanción de dos años por dopaje, lo que afectaría gravemente su futuro en el fútbol.
Los controles antidopaje sorpresa son comunes en el mundo del fútbol, y fue precisamente en uno de estos donde Papu Gómez fue detectado con sustancias prohibidas antes del Mundial. El jugador argentino argumentó que tomó un jarabe de uno de sus hijos sin consultar previamente a los médicos del club debido a una mala noche que había tenido. Si bien el Sevilla le permitió viajar a Qatar para unirse a la selección argentina, los posteriores análisis confirmaron el positivo y, como resultado, la posible sanción de dos años.
Papu Gómez y su explicación
A pesar de su explicación, las regulaciones antidopaje son estrictas, y el desconocimiento de la lista de sustancias prohibidas no exonera al deportista. Incluso en casos de mal asesoramiento médico, las consecuencias suelen aplicarse. Papu Gómez, de 35 años, podría ver su carrera profesional en peligro si se confirma la sanción de dos años. Lo más probable es que, si se le impone esta sanción, recurra en un intento por reducirla.
Este positivo y las posibles sanciones posteriores crearon dificultades para que el Sevilla pudiera transferir al jugador durante el mercado de verano. Finalmente, el club andaluz tuvo que rescindir su contrato y pagar una parte significativa de su ficha restante. Actualmente, Papu Gómez ha firmado con el Monza en la Serie A italiana, donde ha jugado dos partidos. Sin embargo, su participación futura en la liga italiana está en duda hasta que se haga oficial cualquier sanción, y se desconoce si podrá jugar en el próximo partido de su equipo contra la Roma el domingo.