Andriy Lunin (Krasnohrad, Ucrania, 1999) creció admirando a Iker Casillas y Cristiano Ronaldo, soñando con debutar algún día en el Spider, el estadio del Metalist, apodado así por su forma de araña. Para un chico nacido en una ciudad sin equipos profesionales y con pocos campos en buen estado, el Real Madrid parecía un sueño inalcanzable. Dejó su casa a los 11 años para intentar ganarse la vida con el fútbol, enfrentando todo tipo de dificultades hasta firmar la mejor temporada de su vida en el Santiago Bernabéu.
El Desafío de la Guerra y la Familia
Entre las muchas barreras que ha superado Lunin, ninguna es tan devastadora como la guerra en su país, Ucrania. Este conflicto le atormenta cada día, pero lucha junto a su mujer desde España, enviando ayuda y auxiliando a los refugiados. A pesar de estas adversidades, Lunin mantiene su vida personal en privado, enfocándose completamente en su carrera futbolística.
Una Temporada de Consolidación, Lunin quiere ser titular
La última temporada de Lunin, en la que fue el portero titular del mejor equipo del mundo, fue una recompensa a su duro y silencioso trabajo. Aunque espera que su desempeño tenga continuidad en el Real Madrid en los próximos años, su renovación aún no se ha cerrado. En su primera entrevista en España, Lunin expresó su deseo de permanecer en el club blanco, pero admitió que su futuro está en manos del Real Madrid.
El Compromiso y Trabajo Duro de Lunin
La entrevista con MARCA tuvo lugar en Madrid, en Casa Emiliana, un restaurante en San Sebastián de los Reyes. Lunin sorprendió al aparecer allí en lugar de estar en la playa durante sus vacaciones, mostrando su dedicación al Real Madrid.
Lunin confirmó su deseo de seguir en el club: “Quiero estar con el equipo desde el primer día porque es lo que quiero. Si no quisiera estar aquí, me habría tomado todas las vacaciones, pero yo quiero volver ya y seguir, porque estoy en el mejor equipo del mundo”.
Competencia con Courtois
Al ser preguntado sobre la posibilidad de ser titular frente a Thibaut Courtois, Lunin respondió: “Si ya desde el principio piensas que eres el segundo portero y que no puedes llegar a lo más alto, mejor ni empezar la pretemporada. Sé lo que puedo hacer y a dónde puedo llegar”. Reconoce la calidad de Courtois y cómo su presencia le motiva a mejorar y ser más fuerte mentalmente.
Conclusión
Andriy Lunin enfrenta un futuro incierto en el Real Madrid, pero su compromiso y dedicación son innegables. Su determinación de quedarse y competir por un lugar en el equipo demuestra su carácter y profesionalismo. En un club donde solo 20 o 30 jugadores en el mundo pueden disfrutar de su grandeza, Lunin está dispuesto a luchar por su lugar y seguir trabajando arduamente para lograr sus sueños.