Hablar de las finanzas del Fútbol Club Barcelona a día de hoy, es como entrar en un cajón de sastre, uno se puede encontrar cualquier cosa. Antonio Guijarro ayer advertía de otro peligro, otra amenaza que se cierne sobre las cuentas del club blaugrana, y es relacionada a la venta de Barça Studios y del 51% restante de lo que queda de ese activo. El periodista catalán se preguntaba si habiendo vendido el 49% de Barça Studios por 200 millones, el otro restante 51% valorado en 208 millones, precio que le pusieron auditores independientes, no sufriría en el caso de una devaluación del mercado, dada la exposición que Barça Studios tiene a los NFT y meta, nombres que como sabéis, cayeron y han caído muchísimo en los últimos tiempos en el mercado de valores.
En este sentido, Guijarro apuntaba a que las cuentas del Barça sufrirían un serio revés en el caso de que continuaran cayendo. hay que darse cuenta que estos 208 millones no son el precio cerrado de una venta, sino que por el contrario, es una valoración que han hecho auditores en un momento dado del mercado, que podría no ser el mismo pasado seis meses o un año o el tiempo que fuere necesario.
La volatilidad del mercado hace que este precio pueda variar y que necesite de una revaloración de cuando en cuando, precisamente para actualizar su precio que como como podría ser mucho menor a lo que quedó en la partida, en la memoria de las cuentas blaugranas, que eran esos 208 millones, y que el equipo de Laporta se apresuró a cacarear como un auténtico logro, como ingreso extraordinario. Una caída en el valor bursátil de estos productos, sin embargo arrastraría a las cuentas del Fútbol Club Barcelona, y a la propia entidad en sí misma, a una situación muy delicada y comprometida, de la que tendrían poco margen de maniobra.
El mercado puede hundir al Barça
Por tanto, antes de cacarear determinadas cosas que no son del todo ciertas o, inexactas, mejor seamos prudentes y no empecemos a cantar las victorias antes de luchar las batallas. Laporta sabe perfectamente que la situación del Barça no anima al optimismo, y que por tanto, cualquier mínima batalla debe ser vendida como una gran victoria si se quiere convencer al socio.
Pero todas aquellas voces críticas que andamos siempre pendientes de lo que las finanzas del Fútbol Club Barcelona se pueden o pueden ser interpretadas como no somos tan fácilmente convencibles. por eso periodistas independientes de verdad como Antonio Guijarro, se han molestado en tomar precisamente buena nota de todo lo que está aconteciendo o de todo lo que se está presentando en estas cuentas económicas públicas, precisamente para saber si los números cierran o no.
En cualquier caso, el tiempo será el que determine si la gestión de Laporta y del Fútbol Club Barcelona y de su equipo directivo va en la dirección correcta y adecuada, o por el contrario, llevan una dirección completamente suicida.
