El riesgo de guerra civil que actualmente corre en el Fútbol Club Barcelona es tremendamente alto. La inminente asamblea que se celebrará el próximo 21 de octubre de este mismo año de forma telemática, ha terminado por encender los ánimos de toda la parte de los socios que son tremendamente críticos con la gestión que Laporta está haciendo del club blaugrana en los últimos tiempos. Convertir una asamblea de socios compromisarios en un evento telemático, impide que de hecho, estos puedan demostrar su disgusto, decepción, o desacuerdo con todas las medidas tomadas. Peor si cabe todavía, es que la actual Junta Directiva se justifique diciendo que el coste, que es aproximadamente de unos 300.000 euros, impide la celebración presencial de la misma, ha terminado por hacer explotar algunos socios, algunos de renombre como Jaume Llopis.
El mismo Jauma Llopis ayer, a la salida de la reunión que efectivamente había acordada, terminó por explotar ante las cámaras de El Chiringuito, diciendo que era una absoluta vergüenza injustificable decir que la Asamblea telemática y su coste, impiden celebrar una asamblea presencial como todo el mundo sabe punto compartidas presupuestarias de la altura de cientos y cientos de millones como parece difícilmente creíble que una reunión de apenas 300.000 euros sea de momento, decía el economista.
Además la no presencia de medios de comunicación, también hace pensar que el evento será básicamente controlado por toda la directiva de la puerta, a nivel de no tener ningún tipo de aparato o voz crítica de la gestión.
Por eso es por lo que Jaume Llopis se ha convertido en la voz visible de todo ese aparato crítico del socio culé que no está nada dispuesto a aceptar lo que Laporta vende como una auténtica y extraordinaria gestión del equipo blaugrana.
Riesgo de guerra interna en el Barcelona

Así que, por tanto, gente tan ilustre como el propio Jaume Llopis, aprovechó su presencia ante las cámaras en el día de ayer para dejar claro que la situación en la gestión y en las cuentas del club blaugrana no es tan optimista como el propio presidente de la entidad dice que es.
Jaume Llopis aludía a los 700 millones de pérdidas que se han registrado en los últimos ejercicios, y que solamente las palancas pudieron salvar. Sin embargo, hacía alusión, a que solamente una venta de un gran activo junto con el incremento en los gastos, el descenso en los ingresos, y otras tantas partidas como por ejemplo, la de la deuda, que en el caso de los tiempos de Bartomeu era de 1.300 millones y que todavía no se ha subsanado, sino que por el contrario se ha aumentado en otros 1,500, hacían y hacen de la situación de las cuentas y de la gestión del club, algo absolutamente imposible de sostener en el tiempo.
Por el contrario, mostraba una preocupación sin precedentes que de alguna manera, vaticina un escenario absolutamente crítico en el futuro a corto y medio plazo del Fútbol Club Barcelona. Estas voces críticas, al contrario de decrecer, van incrementándose a medida que se acerca a la celebración de dicha asamblea como por lo tanto, se puede concluir que la situación dentro del club blaugrana no es precisamente la de una balsa de aceite y la inminencia de una posible guerra civil dentro de el aparato del socio del club culé coma podría estallar en cualquier momento.
Que le pidan al enano toda la plata que le regalaron
Cerca 700. 000.oo millones si no es que me quedo corto